Utiliza una solución de seguridad móvil: Instala y utiliza una aplicación antivirus o de seguridad móvil confiable en tu dispositivo. Estas aplicaciones pueden ayudar a protegerte contra malware, phishing y otras amenazas en línea, así como a proporcionar funciones adicionales de protección de datos, como el bloqueo remoto y la eliminación de datos en caso de pérdida o robo.
Utiliza un código PIN o una contraseña segura: Establece un código PIN o una contraseña fuerte para acceder a tu dispositivo. Evita patrones simples o códigos PIN fácilmente predecibles. Una contraseña segura es crucial para proteger tus datos en caso de pérdida o robo del dispositivo.
Activa el bloqueo de pantalla automático: Configura tu dispositivo para que la pantalla se bloquee automáticamente después de un período de inactividad corto. Esto asegura que si dejas tu dispositivo desatendido, se requiera el código PIN o la contraseña para volver a acceder.
Habilita la autenticación de dos factores (2FA): Donde sea posible, activa la autenticación de dos factores en tus aplicaciones y cuentas. Esto proporciona una capa adicional de seguridad al requerir un segundo método de verificación, como un código enviado a tu teléfono móvil, además de tu contraseña.
Mantén tu sistema operativo y aplicaciones actualizadas: Instala regularmente las actualizaciones de software y de aplicaciones en tu dispositivo. Las actualizaciones a menudo incluyen parches de seguridad importantes que corrigen vulnerabilidades conocidas y protegen tu dispositivo contra ataques cibernéticos.
